En la Biblia es muy importante entender que no hay ninguna instrucción específica en cuanto a la forma de adorar. De los ejemplos de iglesias que se encuentran en el Nuevo Testamento podemos deducir algunas de las actividades. Pero no hay definición de liturgia, forma de adoración o que música que tenemos usar, ni en donde una iglesia debe realizar sus cultos. Entonces cada iglesia local determina su propia forma de adorar.
En IBB nuestras reuniones son diseñadas para preparar al creyente espiritualmente y emocionalmente para actuar en la iglesia con su don espiritual en particular, y para extender el ministerio de la iglesia a la comunidad en la cual vivimos a diario. Entonces, nuestra visión es de evangelizar a las personas que Dios trae a nuestro camino, y luego dar a las personas que reciben el evangelio y se convierten a Cristo como Salvador instrucción acerca de cómo seguir a Jesús, lo que llamamos discipulado.
Después de recibir la instrucción del discipulado, el creyente se involucra en un ministerio de la iglesia según el don espiritual que ha recibido del Espíritu Santo. Siempre la meta es de compartir el evangelio con otros, para que ellos puedan recibir al Señor como Salvador, y seguir en el discipulado, también.
Como crecen los creyentes, Dios llamará a algunos para entrar en el ministerio como pastores o misioneros. Estudiarán en nuestro instituto bíblico para recibir la preparación adecuada en cuanto a estos oficios. De esta forma tendremos la capacidad de extender el ministerio de nuestra iglesia a otras comunidades, aldeas, pueblos y hasta otros países. Así crece el Reino de Dios. Tenemos el privilegio de ser una pequeña parte de esta obra mundial.
Obra Misionera:
Desde que IBB fue establecida, hemos sido una iglesia con una visión mundial. Empezamos a apoyar familias misioneras nacionales e internacionales. Una de las primeras ofrendas que recogimos como iglesia fue enviada a una familia misionera. Y desde entonces nos hemos involucrado en este ministerio. Y en 1988 enviamos a uno de los nuestros, Lucio Arraes Sade a Brazil para abrir un ministerio en ese país, donde estableció dos obras entre las colonias de leprosos en el noroeste, cerca de la ciudad de Belém.
Actualmente estamos apoyando a 16 obras distintas desde África hasta Alaska, y, el Señor nos ha dado un corazón sensible a las necesidades en estas obras. Cada año celebramos nuestro aniversario en el mes de noviembre, y junto con esta celebración realizamos nuestra conferencia misionera. Que honor es ser una iglesia establecida por misioneros, y que ahora apoyar a varias familias misioneras en su ministerio de evangelizar en el país a donde el Señor les ha mandado.